martes, marzo 01, 2005

La gran nevada

Hoy, mirando las previsiones meteorológicas he sido consciente de la gran nevada que se avecinaba a mi población. Yo, como suelo ser muy previsible, lo primero que he hecho ha sido imaginarme el caos circulatorio que se armaría (como hace tres años cuando los autobuses ante la que caía abrieron las puertas y dijeron a la gente que se bajara a la calle porque se negaban a circular). Así que puestos a pensar, he pensado que tal vez no podría salir de casa ante tal nevada, tengo que confesar que hoy el termometro estaba un poco más alto que los otros días, pero como yo me fio de los que saben más que yo pues no iba a dudar del hombre del tiempo. Así que rozando la locura, ya sé que puede sonar algo exagerado, pero conociendome a mi casi lo es porque como he dicho antes soy bastante previsible, he decidido no ir al cursillo del mediodía. Sí, he hecho campana, no he ido a clase, algo practicamente impensable en mi, pero es que la amenaza de la gran nevada me ha atemorizado (supongo que si ahora digo que no me apetecía porque realmente estaba muy cansada no quedaría tan bien como si me monto la película de la nevada, suerte que no me lee mucha gente ;)) así que ahora tendré una mancha negra en mi expediente, he faltado un día a clase, no sé si podre vivir con semejante trauma snifs snifs
Ya que me he quedado en casita he aprovechado para preparar un delicioso caldo casero de ave y verduras, y como no, disfrutar de algo que casi tengo olvidado a esas horas: ver la televisión. Me he sorprendido al ver un programa de esos rosas y lo triste es que no conocía a nadie de los que salían, ¿me estaré quedando desfasada?, tendré que intentar ponerme al día o en las conversaciones me perderé al no saber reconocer al novio de la ex del ex del primo de la hermana del ex del ex-cuñado de la ex-amante que es amiga de la ex-novia de un futbolista famoso. Para que luego digan que el mundo rosa no es interesante!
Pero yo a lo que iba, el rato ha ido pasando y la gran nevada no se ha dignado a dejar ni un triste copo de nieve, curioso, con la que está cayendo tan cerca de aquí y yo con las ganas que tengo de ver la nieve me voy a quedar con las ganas. En fin, que otro día será porque hoy de gran nevada nada de nada, al contrario, mientras escribo estoy viendo el sol y no logro distinguir ni una triste nubecilla en el cielo azul, ¿será porque mi ventana es pequeña? o ¿será porque me voy a quedar sin nieve y si quiero hacer guerra de bolas tendré que ir este finde a algún sitio donde haya nevado?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La verdad es que ha sido un poco decepcionante que no haya nevado un poquito por aqui. No hacía falta un metro o dos, solo la suficiente para que por unas horas esas moles de edificios grises y tristes que a veces son las ciudades se convirtieran en unos paisajes de postales de navidad. Pero como dices tu, luego todo es un caos. Pero, para que nos vamos a engañar, si estamos esperando como niños pequeños que todo quede inundado por esa blanca capa. Pero no te preocupes que este finde iremos a donde la magia a llegado y nos lanzaremos esas bolas ;) Un mimosete.
Lluis

Puri dijo...

Con la nevada que he visto yo esta mañana en Lleida y aquí a dos velas nos hemos quedado sin ver la nieve :(
Me apunto lo del sitio ese mágico cubierto todo de nieve, aunque para qué engañarnos, la verdad es que lo divertido es la guerra de bolas de nieve, así que ¡al ataque! ;) Si es que este año todavía no he tocado nieve! Mimosetes